Empecemos por la pregunta base: ¿Qué es el liderazgo? Una buena definición podría ser, el dilema habitual que se plantea siempre que una característica humana de una persona está muy por encima de la media colectiva.
Y ¿nacemos con esa característica o nos convertimos en ella? Así que hoy hablamos sobre el dilema: ¿Se nace líder o se llega a serlo?
Este dilema se plantea normalmente para las cualidades deportivas, comunicativas, carismáticas, políticas, culturales, artísticas y religiosas. Y casi siempre hay dos respuestas, a menudo opuestas, que reflejan exactamente la naturaleza de la propia pregunta:
«uno nace ya inclinado hacia una determinada actitud»
Esta suele ser la respuesta de quienes reconocen la habilidad de otros, pero por falta de motivación intrínseca o desinterés, no hacen nada por reducir la distancia con los mejores en ese campo.
«Uno sólo es bueno porque ha practicado más que los demás»
Esta suele ser la respuesta de quienes no aceptan que otro sea mejor y, por lo tanto, por envidia, suelen denigrarlo, afirmando que si practicaran de la misma manera, serían aún mejores.
Los estudios, la experiencia y la historia muestran una realidad algo distinta de las dos respuestas extremas que se suelen dar. Vamos a detallarlo.
¿Se nace líder o se llega a serlo? La verdad
La realidad sobre los líderes que nacen o se hacen puede expresarse del siguiente modo:
Las personas que destacan en diversos campos humanos nacen ciertamente con aptitudes ya desarrolladas en el vientre materno, pero el entorno familiar y social, la educación, las experiencias vitales y laborales y los encuentros con otras personas pueden modificar fuertemente sus aptitudes, pasiones e intereses.
Un ejemplo clásico, con el que te habrás topado, es el de la escuela: normalmente, a un chico que es bueno en los estudios se le llama «friki», casi como queriendo decir que tiene buenos resultados porque estudia demasiado.
Normalmente los que son muy buenos en la escuela no estudian mucho más que los demás, pero son más constantes y tienen más método; sin embargo, suponiendo que el supuesto «friki» estudie más que los demás, ¿te has preguntado por qué lo hace?
La respuesta es muy sencilla: le apasiona lo que hace y quiere destacar en ese campo, no es diferente de alguien que juega bien al fútbol, toca bien un instrumento musical, pinta o es un fenómeno de la PlayStation.
Nuestra cultura actual, por desgracia, valora más a un friki del fútbol que a un friki de la ciencia. Para los antiguos romanos, el arte militar era más importante.
El secreto del éxito que tiene todo líder
- La excelencia sólo puede alcanzarse mediante la pasión y la práctica constante.
- Sólo la verdadera pasión y la motivación pueden sostener el sacrificio del ejercicio constante, incluso para los superdotados por naturaleza.
Entonces, ¿los líderes nacen o se hacen?
El liderazgo eficaz se construye día a día ejerciendo influencia sobre los demás, lo que, al expresar la integridad de los valores y la visión, da la motivación para lograr mejoras en uno mismo y en los demás.
Después de reflexionar sobre lo que acabo de contarte, seguramente estarás de acuerdo y quizás tengas ganas de empezar a desarrollar y mejorar tu liderazgo. O puede que no estés de acuerdo y pienses que no tiene sentido esforzarse, ya que los líderes nacen.
Seguramente hay personas que nacen con talento, pero sólo con la formación adecuada pueden llegar a ser eficaces y virtuosas, sin tirar su talento al viento.