¿Lo más difícil de organizar un viaje? Sí, averiguar cómo preparar el itinerario para un nuevo destino.
A menudo es difícil intentar compaginar tus preferencias con el tiempo disponible. Si eres un planificador en serie, la forma en que hagas este trabajo determinará lo bien que te vaya el viaje (¡y tus nervios!). Aunque no te guste planificar, siempre es buena idea trazar un itinerario de viaje o, como mínimo, una lista de lugares que no te quieres perder por nada del mundo.
Como te habrás dado cuenta, he estado hablando de viajes y no de vacaciones. Esta guía sobre cómo preparar un itinerario de viaje será muy útil para quienes quieran organizar un viaje bastante complejo por su cuenta (por complejo me refiero a con desplazamientos constantes, con distintos lugares donde hacer noche más o menos todas las noches: en resumen, ¡un buen viaje por carretera!
Pero también puede ser útil para quienes necesiten un itinerario más sencillo, quizá para explorar una ciudad a pie o vivir un fin de semana completo. Así que, ¿por qué esperar más? ¡Pongámonos en marcha!
Todos hemos tenido un compañero de viaje «incómodo». Uno de esos, ‘Sí, sí, me parece bien cualquier cosa. Organízalo tú, que yo voy». ¡Genial! Una vez encontrado el compañero, empiezas a preparar el itinerario. Le preguntas qué preferiría hacer, dándole varias opciones, y la respuesta es siempre: «¡Sí, sí, todo me parece bien!». Luego, por el camino, le oyes quejarse en cada parada que habéis elegido visitar: «Sí, pero ya te dije que…».
Por eso LA REGLA CERO es: antes de preparar tu itinerario, elige un compañero de viaje que se adapte a cualquier complicación y no te cause problemas. Créeme, más vale prevenir que curar. Otra opción es plantearse el «modo abandono»…
Marca los lugares más bonitos en Google Maps
En primer lugar, recopila información para tu viaje comprando una guía Lonely Planet, National Geographic o la que prefieras y empieza a estudiar y sumergirte en tu destino.
Si es cierto que el viaje comienza en el momento en que empiezas a soñarlo, tus antenas estarán súper receptivas, listas para rastrear lugares que guardar, incluso sin buscarlos específicamente: ¡que no te encuentren desprevenido! Puedes encontrar lugares para incluir en tu itinerario en blogs, redes sociales o en las páginas web oficiales de los destinos turísticos.
A medida que descubras lugares que te gustaría ver, añádelos a Google Maps. Para ello, sólo tienes que abrir la aplicación y hacer clic en «Guardar», eligiendo en qué lista quieres poner el lugar que quieres ver. Yo, por ejemplo, los desgloso por regiones o estados, dependiendo del viaje que tenga pensado hacer. Lo bueno y realmente útil de este método es tener una representación gráfica de los lugares que tendrás que incluir en tu itinerario de viaje.
Cómo preparar un itinerario: priorizar
Durante un viaje, tu peor enemigo será el tiempo. Por lo tanto, debes priorizar. Marca las atracciones con mayor prioridad en tu itinerario y organiza tu tiempo para visitarlas, pero recuerda marcar también las actividades con menor prioridad, que podrás visitar si tienes más tiempo o si no puedes visitar una o varias de las más importantes.
Puede que te resulte difícil aceptar no visitar algunas atracciones que te interesan especialmente, pero ¿preferirías visitarlas todas, aunque sea a toda prisa, o visitar menos pero disfrutarlas en su totalidad?
En esta fase debe ser lo más realista posible. Con esta premisa fundamental, quiero decir que al trazar su itinerario debes intentar no exagerar. Por ejemplo, no tiene sentido marcarse que en 3 horas visitarás 5 atracciones si sabes perfectamente que ni parándo el tiempo lo conseguirías. Si, por el contrario, sabes que en 3 horas podrás visitar quizás 3 atracciones, marca en tu itinerario que visitarás 2. Dejándote la posibilidad de visitar la tercera, en caso de que te sobre tiempo.
Calcula cuánto tiempo te llevará el viaje
Si es cierto que no conviene pasarse con los atractivos a ver en un solo día, tampoco conviene pasarse con los kilómetros a recorrer en el caso de un viaje por carretera. Por eso, lo mejor que te sugiero es que crees una especie de itinerario día a día, para que puedas calcular cuántos kilómetros tendrás que recorrer y cuánto tiempo dedicarle. Para ello, sólo tienes que ir a Google Maps y hacer clic en el símbolo azul de «indicaciones». A continuación, tendrás que introducir tu punto de partida y destino, y obtendrás información sobre el tiempo que necesitas para recorrerlo y un mapa de la ruta.
Añade a tu itinerario el tiempo que te llevarán estos trayectos. Además, si tienes varias etapas en un día, puedes hacer clic en «añadir destino» e introducirlas, de modo que tengas la ruta completa del día. En función de los resultados que te proporcione Google Maps sobre el tiempo de los distintos trayectos, podrás determinar cuánto tiempo dedicar a visitar las atracciones.
Enriquece tu viaje con experiencias
Aunque soy una gran fan de los viajes DIY, creo firmemente que son las experiencias las que hacen que el viaje sea auténtico, único e inolvidable. Por ejemplo, ¿qué sería visitar una bella ciudad europea sin visitar sus lugares emblemáticos? ¿Qué sería ir más allá del Círculo Polar Ártico y no cazar auroras boreales? En definitiva, ¿qué sería un viaje sin experiencias?
Los viajes no son imágenes para admirar sin más. Son lugares para vivir experiencias. En los que zambullirse de cabeza en la cultura. Para descubrir los lugares más bellos y las costumbres más extrañas. Y para vivir experiencias únicas. Estos son los viajes. Para enriquecer tu bagaje de experiencias y hacer un itinerario turístico a la altura, sólo tienes que conectarte a las mejores plataformas donde encontrar billetes, excursiones, tours y mucho más en todas las regiones del mundo.
Elegir dónde alojarse
Elige dónde alojarte y reserva con antelación para evitar sorpresas desagradables, como no saber dónde dormir o tener que pagar un precio demasiado alto.
Para obtener la información que necesita, sólo tienes que teclear en Google: «Dónde alojarse en. «Consejos sobre dónde alojarse en…» para obtener sugerencias muy útiles sobre las mejores zonas o alojamientos que podrían encajarte. Te recomiendo que también incluyas en tu itinerario los lugares donde te alojarás y la información sobre ellos.
Por ejemplo, puedes anotar la dirección y cualquier característica especial que te resulte útil (por ejemplo, en algunos casos puede ser importante indicar si hay cocina o no). Una vez que haya elegido los destinos aproximados en los que se alojará, vaya al sitio de reservas y asegúrese de reservar con suficiente antelación, preferiblemente con cancelación gratuita.
¿El itinerario? ¡Dale la vuelta!
A veces, sobre todo en los primeros días de un viaje, es fácil emocionarse tanto que no se respeta lo acordado previamente. Así que: añade paradas, cambia rutas y abandona antes de tiempo si no te gusta un lugar.
Pero ten cuidado: recuerda las prioridades que diste a las etapas «importantes» al principio de la redacción de tu itinerario de viaje y haz tus valoraciones. Por supuesto, siempre debe ser tu elección: déjate llevar por el viento si es lo que te apetece.
Toma ese ferry o sigue ese camino de tierra que tanto te inspira: renunciar a algo que habías puesto en el itinerario por algo inesperado puede resultar una sorpresa aún más agradable.