¿Por qué los ricos nunca acumulan dinero? Al pensar en cómo hacerse rico, la mayoría de la gente piensa que acumular dinero es la mejor estrategia y ni siquiera se plantean las inversiones que podrían hacer con sus ahorros.
Pero no es exactamente así. Cuando se trata de la libertad financiera, ahorrar solo es una estrategia perdedora (Ver «Inflación: ¿Qué es y qué daño puede hacer a tus ahorros?«). ¿Por qué? Porque el dinero es simplemente un medio. Para aportar valor, debes moverte, y si dejas de moverte, se acaba. Por lo tanto, ahorrar dinero no hace que tu dinero crezca, ¡sino que tu dinero pierda valor con el tiempo!
Si confiar solo en los ahorros no es la estrategia ganadora para ser financieramente libre, ¿qué puedes hacer?
En primer lugar, tienes que analizar tu presupuesto personal y el uso que haces de tu dinero. Los pobres gastan según lo que ganan y no tienen el problema de ganar más; simplemente se las arreglan y ajustan su nivel de vida a su salario. Los ricos, en cambio, siempre están ideando nuevas formas de aumentar sus ingresos y, en consecuencia, de mejorar su nivel de vida.
En este artículo, quiero compartir contigo cuatro reglas que te ayudarán a gestionar mejor tu presupuesto personal.
Pagarse a sí mismo primero
Una de las reglas básicas para gestionar bien tu dinero es reservar una parte para invertir y hacerla crecer con el tiempo. El problema es que normalmente solo se aparta lo que se consigue ahorrar, sin establecer una cantidad fija.
Lo que queda, después de pagar los diversos gastos fijos, necesarios para el mantenimiento, se aparta y, con demasiada frecuencia, no se aparta nada o demasiado poco. ¡Ojo! Esto se debe de hacer después de tener controlado el fondo de emergencia.
Por lo tanto, es necesario establecer de antemano cuanto reservar, mes a mes, convirtiéndolo en una prioridad a la par que otros gastos; un buen comienzo es reservar al menos el 10% de lo que se gana mensualmente. Y debes hacerlo incluso antes de pagar todo lo demás. De ahí la regla de «pagarse a sí mismo primero». De hecho, con lo que apartes podrás hacer inversiones.
Tus gastos predicen tu futuro
Si quieres predecir tu futuro financiero, simplemente analiza la lista de tus gastos. Por ejemplo, ¿cuál de estas dos personas crees que tiene un mejor futuro financiero?
Persona A con los siguientes gastos:
- Donación a una organización benéfica.
- Provisión mensual (ahorro).
- Libros de formación sobre inversiones.
- Afiliación al gimnasio.
- Seguro de vida.
Persona B con los siguientes gastos:
- Restaurante.
- Zapatos y ropa nuevos.
- Coche nuevo (a plazos).
- Entradas para el partido de futbol.
- Vacaciones.
Evidentemente, le he mostrado dos ejemplos completamente opuestos; pero no están lejos de la verdad. Cuando miras las columnas de gastos de la mayoría de la gente, están llenas de deudas y gastos innecesarios. Ahora intenta elaborar tu propia lista de gastos…. ¿Se parece más a la de la persona A o a la de la persona B?
Planificar los gastos
Los pobres, si quieren un artículo de lujo, piensan: «No puedo permitírmelo». La gente rica, o mejor dicho, la gente financieramente inteligente, si quiere algo que no puede comprar en ese momento, se pregunta: «¿Cómo puedo permitírmelo?».
Lo que hacen las personas financieramente inteligentes es invertir su dinero de forma adecuada para alcanzar determinados objetivos.
Pongamos el ejemplo de la compra de un coche nuevo; normalmente, si no tienes la liquidez necesaria, tendrías que endeudarte y pagar una cuota mensual.
Pero hay 2 alternativas inteligentes:
- Encontrar formas de aumentar tus ingresos mensuales para poder comprar (a plazos) con el excedente generado.
- Planificar la compra a medio plazo (por ejemplo, dentro de 5 años) y así invertir parte de tus ahorros, de forma adecuada, con el objetivo de alcanzar el capital necesario para la compra.
Ahorra e invierte, ¡siempre!
Ser capaz de seguir las tres primeras reglas en tu presupuesto personal significa construir una mentalidad ganadora, que te sostendrá incluso en tiempos difíciles. Muchas personas no piensan en su futuro financiero y creen que nunca tendrán que enfrentarse a dificultades financieras.
Sin embargo, los posibles «imprevistos» son prácticamente infinitos, y pueden encontrarse sin una fuente de ingresos que les permita mantener su estilo de vida. Así que, aunque opines que tu situación financiera es «inexpugnable», sigue ahorrando e invirtiendo.
Otra cosa que la mayoría de la gente tiene en común es dejar de invertir cuando hay una crisis económica. Las personas financieramente inteligentes, en cambio, saben que es precisamente durante las crisis cuando surgen las mejores oportunidades de inversión.
Y es también para estar preparado para aprovechar estas oportunidades que lo más importante es desarrollar tu inteligencia financiera que te permitirá ganar dinero, independientemente de las circunstancias.